sábado, 19 de julio de 2008

CIVICAN ofrece 100 propuestas para el verano

El centro Civican de la Fundación Caja Navarra ha programado más de cien propuestas de música, narración oral, baile, cine, títeres y animación a la lectura para la temporada estival, de entre las que destacan los conciertos en vivo, que protagonizarán Pedro Iturralde, Mariem Hassan, Dissidenten o La Shica, entre otros. Asimismo, las actividades dirigidas al público infantil y familiar tienen a los detectives como protagonistas y, como todos los años, continúan los ciclos habituales en estas fechas, como El patio en danza, Humor a la fresca o El camino del cine europeo.

TEATRO.

El ciclo Humor a la fresca ofrece tres ocasiones para reír: Elvi Ventrilocuo actuará el 5 de agosto; T'Ombligo mostrará su Cabaret vampírico el día 12, y José Juan Vaquero presentará Es lo que hay el día 19.

MÚSICA.

Como en ediciones anteriores, Civican ha programado recitales al aire libre, que se desarrollarán en el patio exterior entre el 30 de julio y el 25 de agosto. Este programa de conciertos pretende incidir en propuestas y estilos en los que prime la fusión, la mezcla y el mestizaje musical como elemento definitorio. Cuatro de estos conciertos tendrán lugar durante cuatro lunes consecutivos a las 20.00 horas, comenzando el 4 de agosto con una actuación de Wagner Pá, que realizará un repaso en formato acústico a un repertorio en el que la música brasileña convive con ritmos como el reggae, el funk o el ska. El 11 de agosto será el turno de Duende y aire, una joven formación que presentará una propuesta que combina ritmos como el swing, el dixie o la bossanova con distintos palos del flamenco. El 18 de agosto, el patio de Civican acogerá un concierto de Muyayos de raïz, que, formado por cuatro músicos de formación clásica, utilizan sus propios arreglos y composiciones para reinterpretar la música tradicional. El 25 de agosto, cerrará el ciclo de tarde Fresno, grupo navarro que ofrecerá un concierto integrado por distintos temas de la música popular latinoamericana y versiones de Serrat, Pablo Milanés o Jorge Drexler.

Por otro lado, las noches de los miércoles darán cabida a cuatro conciertos de música mestiza que tendrán lugar a las 21.30 horas entre el 30 de julio y el 20 de agosto. La cantante saharaui Mariem Hassan protagonizará la primera cita, presentando el 30 de julio Deseos, una obra en la que las melodías saharauis reciben influencias del jazz, el blues o el funk. El miércoles 6 de agosto, el saxofonista navarro Pedro Iturralde presentará junto a su cuarteto Etnofonías un concierto que recorrerá los distintos lugares en los que ha germinado su jazz de fusiones. El grupo alemán Dissidenten traerá el 13 de agosto su nuevo trabajo, Tanger sessions, en una oportunidad única para disfrutar en vivo y en directo con la formación que dio carta de naturaleza a los ritmos étnicos como género musical y que con este disco retoma la senda que inició con Sahara Elektrik. Y, el 20 de agosto, cerrará el ciclo de conciertos nocturnos la cantante ceutí Elsa Rovayo, La Shica, quien presentará Trabajito de chinos, una artista con una puesta en escena única, que funde el flamenco o la copla con hip hop y danza contemporánea.

CINE.

Además, Civican viaja de nuevo este verano hasta los años veinte con un pequeño ciclo de cine mudo acompañado con música en vivo. El próximo martes, 22 de julio, a las 21.00 horas, se proyectará en su auditorio la película de Murnau El último; mientras que el miércoles 23 será el turno de Buster Keaton, director y protagonista de El maquinista de la General. En ambas sesiones, el compositor donostiarra Josetxo Fernández de Ortega interpretará al piano la música que ilustrará las proyecciones.

El curso para cinéfilos El camino del cine europeo que se ofrece en el Archivo General de Navarra prevé proyecciones en Civican entre el martes 26 y el viernes 29 de agosto. En concreto, proyectará, a las 22.00 horas y en versión original subtitulada, El infierno, de Claude Chabrol (26 de agosto); cuatro cortometrajes de Charlot (27 de agosto); El gabinete del doctor Caligari (28 de agosto) y Blow Up (29 de agosto).

DETECTIVES PARA LOS NIÑOS.

El mundo de los detectives va a ser este verano el gran protagonista de las actividades dirigidas al público infantil y familiar. Todas las mañanas y todas las tardes del mes de agosto habrá actividades que darán lugar a juegos como Los expedientes secretos o ¡Atrapa a un ladrón! y a montajes narrativos como Los increíbles casos del comisario cuentista o iniciativas como El club del misterio. El programa se completará con el ciclo Tras la pista de…, que los jueves a las 19.00 horas traerá al auditorio tres obras de títeres y una película.

Los programas Cultur y Correpueblos llegan a 91 poblaciones

Dos nuevas ediciones de los programas del Gobierno foral Cultur y Correpueblos arrancan hoy y, juntos, llegarán a 91 localidades navarras con menos de 200 vecinos.

En Correpueblos, con 64 sedes, 30 localidades solicitaron proyecciones de cine y 34 localidades, representaciones de teatro. De acuerdo con estas peticiones se realizarán ocho actividades en euskera.

Las obras teatrales que se representarán son Popopipo de Trokolo, Zirko Iluna de Hortzmuga, Invierno eseoese de Ortiga Tds, y El Cucumismelo y El beso del agua de Atikus.

Y las películas, a cargo de la empresa Movilcine, son Como locos por el oro (2008), Iron Man (2008), La Búsqueda: El diario secreto (2007), Papá por sorpresa (2008), 27 vestidos (2008), Astérix en los Juegos Olímpicos (2008), Txoritxoak (2006) y Urtemuga festa (2006).

Las localidades beneficiadas son Abáigar, Abaurrea Alta, Acedo, Aguilar de Codés, Aldatz, Alloz, Arandigoyen, Arbeiza, Arellano, Arraitz-Orkin, Artavia, Artazu, Artieda, Baquedano, Barillas, Belascoáin, Beruete, Biurrun, Cabredo, Desojo, Egüés, Elcano, Elorz, Eratsun, Espronceda, Etxarren, Ezkurra, Gabarderal, Galar, Gallipienzo, Garde, Gazólaz, Genevilla, Villanueva, Imárcoain, Iza, Labiano, Larraona, Larrasoaña, Larrión, Lazagurría, Legarda, Lorca, Luquin, Mendaza, Navascués, Oitz, Ollacarizqueta, Salinas, Sansol, Subiza, Torralba del Río, Torres del Río, Uitzi, Unanu, Undiano, Unzué, Urrotz, Urzainqui, Uterga, Vidángoz, Villamayor de Monjardín, Zariquiegui y Zúñiga.

Por su parte, Cultur llegará desde hoy a 27 localidades o enclaves de la Comunidad Foral. Hasta el 31 de agosto se podrá asistir a las vísperas en los monasterios de Leyre (de lunes a domingo a las 19.00 horas y jueves a las 19.30 horas) y La Oliva (de lunes a sábado a las 18.30 horas y domingos a las 18.25 horas). Asimismo, hasta el 31 de agosto se podrán visitar las exposiciones de Teresa Sabaté en la Casa de Cultura de Aoiz, de Alberto Berástegui en el Palacio Real de Olite, de Joaquín Ilundáin en el Palacio del Señorío de Bertiz y de Jesús Rivero en la Casa de Cultura de Viana. El resto de las actuaciones, fundamentalmente música, danza y catas de vino, tendrán lugar, además de en los ya mencionados, en lugares como Ujué, Los Arcos, Etxauri, Señorío de Beraiz, Lekunberri, Sangüesa, Donamaria, Roncesvalles, Lizaso, Orbaitzeta, Murchante, Olite, Corella, Roncal, Ochagavía, Elizondo, Puente la Reina, Artajona, Monasterio de Irantzu, Javier, Corella, Tudela o Estella.

Markeliñe, Maracaibo y Los Gingers actuarán en Tafalla, Estella, Corella y Peralta dentro del programa Estivales 08

El programa Mancomunados de subvenciones del Gobierno de Navarra promociona Estivales 08, de los ayuntamientos de Tafalla, Estella, Corella y Peralta, para ofrecer espectáculos que mezclan teatro, circo y música de la mano de tres compañías, Markeliñe, Maracaibo y Los Gingers, que turnarán sus funciones en los cuatro municipios entre el lunes 21 y el sábado 26 de julio.

La quinta edición ha programado a Markeliñe, compañía vasca que propone Terapia sobre palé, un espectáculo en torno a la pareja, muy visual y en el que predomina la gestualidad del actor y, sobre todo, la sorpresa en la forma y en el fondo.

Por su parte, Maracaibo Teatro llega con Bufones, obra de animación con estética medieval de fantasía. Los actores dan vida a alegres personajes que realizan distintas coreografías con distintas técnicas como los zancos, cariocas, banderas, grandes títeres, artilugios de fuego, etcétera.

Los Gingers presenta Perlas y plumas, propuesta inspirada en los ambientes de varietés, donde la música, el baile y el glamour de los personajes se transmite a través de los malabares, la barra fija, la báscula o las acrobacias.

CALENDARIO:

Corella. En la plaza de los Fueros: Perlas y plumas, de Los Gingers, el 21 de julio; Terapia sobre palé, de Markeliñe, el día 22, y Bufones, de Maracaibo, en 23.

Tafalla. Las funciones de Perlas y plumas, el día 22; Terapia sobre palé, el día 23, y Bufones, el día 24, se verán en la plaza de Navarra.

Estella. Perlas y plumas, el día 23; Terapia sobre palé, el día 24; Bufones, el día 25, en la plaza de los Fueros.

Peralta. Perlas y plumas, el día 24; Terapia sobre palé, el día 25, y Bufones, el día 26.

La Quincena Musical Donostiarra, la gran cita del norte

Un centenar de espectáculos de diferentes estilos forman la programación de la 69 edición de la Quincena Musical de San Sebastián, que se celebra del 4 de agosto al 6 de septiembre y homenajea a los compositores Pablo Sarasate, Olivier Messiaren y Karlheinz Stockhausen, así como al director Ataúlfo Argenta. También al escultor vasco Jorge Oteiza.

Siete estrenos, varias óperas, grandes sinfonías, música antigua y contemporánea, así como espectáculos de danza componen la Quincena de 2008, que durante algo más de un mes se desarrollará en una treintena de escenarios, varios de ellos fuera de San Sebastián. La jornada inaugural, el lunes 4 de agosto, incluirá dieciséis propuestas, entre las que destacan los estrenos de las obras Wintersonnenwende-2, de Ramón Lazkano, que será interpretada por el violoncellista Razvan Suma y el pianista Iosu Okiñena, y Arquitectura de espejos de José María Sánchez Verdú, ejecutada por los acordeonistas Iñaki Alberdi e Iñigo Aizpiolea.

El inicio del festival estará también protagonizado por el recuerdo a la figura de Oteiza, con sendos recitales de música tradicional vasca junto a su escultura Construcción vacía del Paseo Nuevo y su Piedad de la Iglesia de San Vicente.

De esta primera jornada sobresale además el espectáculo que bajo el título Capricho Sarasate se celebrará en el Teatro Victoria Eugenia en memoria del genial violinista y compositor navarro fallecido en 1908, que protagonizarán el músico libanés Ara Malikian y el coreógrafo Juan Kruz Díaz de Garaio. La representación navarra se completará, además, con la participación de la Coral de Cámara de Pamplona, el 5 de agosto, y con varias funciones del grupo Argia, fundado por Juan Antonio Urbeltz.

El teatro donostiarra más emblemático albergará las grandes voces del contratenor Philippe Jaroussky (19 de agosto), de la soprano Ainhoa Arteta (25 de agosto) o del Coro de la Radio de Berlín (4 de septiembre), al tiempo que acogerá a tres reputados solistas como Frank Peter Zimmermann, Christian Zacharias y Heinrich Schiff tocando juntos los dos tríos para piano de Schubert (27 agosto). El Victoria Eugenia vuelve en la Quincena de este año a compartir sede principal con el auditorio del Kursaal, donde revivirá la pasión amorosa de Carmen, desde dos visiones bien distintas.

El Kursaal será el encargado de recibir también a las grandes orquestas, como la Nacional de España, que actuará una vez con el Orfeón Donostiarra en homenaje a Ataúlfo Argenta, el 28 de agosto, y otra al día siguiente con el Coro Nacional de España, en recuerdo del compositor galo Olivier Messiaen. La Filarmónica Checa dirigida por Manfred Honeck, el día 30 con el violoncellista Claudio Bohórquez, y el 31 con la soprano Measha Brueggeergosman, y la Orquesta Nacional del Capitolio de Toulouse bajo la batuta de Tugan Sokhiev, los días 2 y 3 de septiembre, son otros de los prestigiosos conjuntos que estarán en el Kursaal, donde también tocará el día 5 la sinfónica alemana Baden-Baden und Freiburg con Roger Muraro al piano.

La Quincena completará su programación con sus tradicionales ciclos: el de Órgano, del 1 al 22 de agosto fundamentalmente en la catedral del Buen Pastor; el de Música Antigua, del 5 al 12 en el convento de Santa Teresa, y el de Música Contemporánea, que girará en torno al compositor alemán Stockhausen, entre otros.

viernes, 18 de julio de 2008

Entradas a la venta para la actuación de Paco de Lucía

Ya están a la venta las entradas para los conciertos y las clases magistrales del I Festival de Guitarra de Pamplona, que se celebrará del 28 al 30 de agosto en recuerdo de Sabicas.

Las entradas para la gala inaugural, que será las 20.30 horas en el Teatro Gayarre con Paco de Lucía y Juan Habichuela como invitados, cuestan en sala 18 euros, en palco 14 euros y en anfiteatro 6 euros, con descuentos para menores de 30 años. Pueden adquirirse en www.teatrogayarre.com y en la taquilla del Gayarre (cerrada del 14 de julio al 20 de agosto).

Las entradas para los dos recitales de guitarra en las murallas de la Ciudadela y las inscripciones al taller y la clase magistral pueden realizarse a través del 948 222 444, de lunes a viernes de 9.00 a 20.00 horas y los sábados de 9.00 a 13.00 horas, o en los cajeros de Caja Navarra

Una comedia amable de Shakespeare, teatro de animación callejera y la magia de El Brujo abren hoy el Festival de Olite

El Festival de Teatro Clásico de Olite se inaugura hoy con la representación de tres espectáculos: De místicos y pícaros, monólogo de Rafael Álvarez El Brujo en el escenario grande, la comedia de Shakespeare Mucho ruido y pocas nueces, en una versión reducida que se puede ver en el claustro de San Pedro, y el montaje de calle Meninetes, por la tarde en la plaza Carlos III.

Toda la programación pinchando aquí.

En total, esta muestra (que no Festival, como pomposamente se pregona) ofrece hasta el domingo 3 de agosto 27 funciones de 16 propuestas escénicas, de distintos estilos, algunas de ellas dramaturgias totalmente contemporáneas, como la de El Brujo, los sonetos que leerá Emilio Gutiérrez Caba o el Ñaque de Sanchis Sinisterra que ofrece Metamorfosis. Imposibilitado de una línea de programación coherente, Olite ofrece también este año una selección más o menos afortunada de las producciones estrenadas en los distintos festivales de teatro clásico del verano español, así como las producciones más recientes de la Compañía Nacional de Teatro Clásico.

Poca de la oferta de este año la podré ver. Como en años anteriores, estaré parte de estos días fuera de casa. Eso sí, podré desplazarme a Madrid a ver alguna delicatessen, como la que trae un año más Declan Donellan al Teatro Español, en esta ocasión un Troilo y Crésida del que me han hablado maravillas.

Olite ofrece también hoy la inauguración de una exposición fotográfica.

El escenario de la Cava, para 650 espectadores, adosado a uno de los muros del Palacio, ofrece hoy y mañana con el nuevo trabajo de El Brujo, De místicos y pícaros, construido entre los versos de San Juan de la Cruz y Santa Teresa de Jesús y los textos picarescos como El Buscón o el Lazarillo de Tormes. La obra abre también la serie En torno a los cómicos de la legua, que rendirá tributo a aquellos actores y compañías que recorrían los caminos, haciendo llegar el teatro a todos los rincones. Dentro de este apartado se enmarca también la versión de Ñaque o de piojos y actores, que Metamorfosis Teatro mostrará en el claustro de San Pedro el 30 de julio, además de las siguientes funciones de calle: Juglarías, de Carlos Alba, que podrá verse hoy, mañana y el domingo en el jardín viejo del castillo, donde el 27 de julio se representará El buscón, de Templanza, y La herencia de Pantalone o Venecia salvada por las aguas, de Venezia inscena, el día 26 en la plaza de Carlos III el Noble.

Teatro de Fondo ofrece Mucho ruido y pocas nueces en el claustro de San Pedro (120 espectadores) , al que seguirá el domingo otra versión reducida y apañada de Shakespeare: Burguer King Lear, firmada por João García Miguel y con la técnica de clown para plasmar la fragilidad del personaje, en inglés y portugués con subtítulos en castellano. El 1 y 2 de agosto se ofrece El mercader de Venecia, de Darek Teatro, con versión de Rafael Pérez Sierra y dirección de Denis Rafter. Y el ciclo se cerrará con Morboria y su adaptación de El sueño de una noche de verano, transformado en Espíritus del bosque, que el día 3 clausurará el festival.

Emilio Gutiérrez Caba, acompañado por José Mª Arcos, ofrece Sonetos el 31 de julio en el claustro.

En torno al mito donjuanesco se ha programado El burlador de Sevilla, de Tirso de Molina, del Teatro de la Abadía, el 23 y 24 de julio en el claustro; Teatro de papel ofrece El convidado de piedra, del Teatro de formas animadas, el 29, 30 y 31 de julio en la sala de Embajadores del Palacio, y las sesiones de Cómo contar mitos a los niños: El Burlador sin sardina, de Pasadas las 4, el 23, 24 y 25 de julio en la sala de los Arcos. El 24 de julio se celebra el primero de los Coloquios en el Palacio, con el título El Burlador a través de la literatura o cómo ver a Don Juan en el siglo XXI.

La Compañía Nacional de Teatro Clásico ofrece dos propuestas: Las manos blancas no ofenden, de Calderón de la Barca, con dirección de Eduardo Vasco, el 25 y 26 de julio en la Cava, y La noche de San Juan, de Lope de Vega, dirigida por la Joven Compañía de Teatro Clásico, el 27 y 28 de julio en el claustro.

La cantante Diana Navarro, el miércoles 23 en Baluarte

La cantante malagueña Diana Navarro llega a Baluarte el miércoles 23 de julio, a partir de las 20.00 horas, para presentar el segundo álbum de su carrera, 24 rosas. En el primer concierto de la Temporada Verano 2008 de Fundación Baluarte, Navarro interpretará las 14 nuevas canciones de su nuevo disco, que sigue inspirado en las raíces que ha cantado a lo largo de su carrera, como la copla, la saeta o el flamenco, pero fusionado con ritmos étnicos y con algún toque operístico. Las entradas para el concierto se pueden adquirir en los canales habituales: taquilla, teléfono 902 33 22 11 y la web de Baluarte (www.baluarte.com). Los abonados de Baluarte que compren sus entradas en la taquilla obtendrán un 10% de descuento.

Quedan entradas a la venta.

Diana Navarro se dio a conocer en el panorama de la música nacional en 2005 con su primer trabajo, No te olvides de mí, del que vendió 200.000 copias y con el que obtuvo el Premio Ondas 2005 a la artista revelación y la nominación a los Grammy Latino como artista revelación. Este reconocimiento le abrió la puerta que le ha conducido hasta este segundo álbum, 24 rosas, en el que fusiona copla del nuevo siglo, ópera, new age, fado portugués y folclore mediterráneo.

Para dar forma a este nuevo disco, Diana Navarro se ha dejado seducir por la voz de María Callas y así se evidencia en Mira lo que te has perdido, el sencillo de presentación del disco, cuyo videoclip fue en parte grabado en el escenario, backstage y pasillos del Teatro Gayarre. 24 rosas va más allá del lamento y el quejío que tanto conmocionó en su primer disco; es un álbum vitalista y, como ella dice, "pa' gente con alma". Asegura que todos los temas del nuevo disco "se han madurado mucho" para volver a sorprender al público. Además del primer sencillo Mira lo que te has perdido, el álbum 24 rosas está compuesto por los temas Mare mía, Caracoles, Tú me vas, Soñando, Brindo por ti, Ojalá, Mi niña Tadea, Amor mío, Imaginando, 24 rosas, Padre nuestro, Mare mía (latín) y Letanía. Diana Navarro explica que todas estas canciones están inspiradas "en ideas y sentimientos personales", pero también en vivencias y casos de personas cercanas.

En el directo que ofrecerá en Baluarte habrá una parte acústica, en la que la cantante malagueña estará acompañada sólo por el piano, y otra en la que también se unirán violín, guitarra, bajo y percusión.

miércoles, 16 de julio de 2008

72 seleccionados para el concurso internacional de canto Julián Gayarre, que tendrá lugar del 13 al 19 de septiembre

Setenta y dos de los noventa cantantes inscritos han sido seleccionados en la 12 edición del Concurso Internacional de Canto Julián Gayarre, cuyas pruebas eliminatorias tendrán lugar entre los días 13 y 16 de septiembre, mientras que la prueba final se celebrará el 19 de septiembre. Al día siguiente están previstos la entrega de premios y un concierto conmemorativo del aniversario de la muerte de Pablo Sarasate.

Por categorías vocales, 40 son sopranos, 11 tenores, 9 mezzosopranos, 8 barítonos, 3 bajos y 1 bajo-barítono. Por países, 17 proceden de Corea del Sur, 15 de España, 7 de China, 6 de Canadá, 4 de Georgia y Ucrania, 2 de Estados Unidos, Alemania, México, Italia y Chile, y 1 de Argentina, Armenia, Australia, Austria, Bélgica, Irlanda, Rumania, Sudáfrica y Suecia. El listado de los admitidos se puede consultar en Internet a través de la web del concurso, www.cfnavarra.es/gayarre.

El jurado de preselección ha estado formado por Carmen Arbizu, catedrática de Canto del Conservatorio Superior de Música de Navarra Pablo Sarasate; Enedina Lloris, profesora de Canto de la Escuela Superior de Música de Cataluña; y Paloma Pérez Iñigo, catedrática de Canto del Conservatorio Superior de Música de Navarra Pablo Sarasate. El jurado del Concurso lo integran la mezzosoprano Teresa Berganza (presidenta); el tenor Luigi Alva; el director general de la Ópera Nacional del Rhin, Marc Clémeur; el director artístico de la Royal Opera de Suecia, Menno Feenstra; Marianò Horak del Caecilia Konzert-& Theaterag de Zurich; Guy Montavon, intendente general de la Ópera de Erfurt, la mezzosoprano rusa Elena Obraztsova y Pierre Thirion-Vallet, director artístico del Centro Lírico de Auvergne.

El concurso tiene como objeto la difusión del nombre del tenor navarro Julián Gayarre y el impulso a jóvenes cantantes en los inicios de sus carreras. Lo organiza el Departamento de Cultura y Turismo del Gobierno de Navarra, tiene carácter bienal y se viene celebrando en Pamplona los años pares desde 1986. Por el Concurso han pasado cantantes ahora profesionales como María Bayo (1986), Manuel Lanza (1990), Elisabete Matos (1992), Milagros Poblador (1994), Markus Werba (1996) o Jorge Luis de León (2004).

En esta edición la entrega de premios tendrá lugar el día 20 de septiembre, fecha en la que hace cien años murió Sarasate, por lo que el acto estará completado por un concierto dedicado a este violinista navarro en el que se interpretarán obras suyas. El recital estará a cargo de la violinista Patricia Moreno, ganadora del 2ª premio Sarasate 2001, acompañada por la Orquesta Sinfónica de Navarra, que estará dirigida por Cristóbal Soler

viernes, 11 de julio de 2008

Magalia: El Gobierno de Baleares recupera el radioteatro para promocionar a los autores de las islas



En la foto, cuatro autores leyendo en el Castillo de Magalia la pieza de Marta Barceló.

Josep R. Cerdà, delegado de Artes Escénicas del Gobierno de Baleares, presentó el viernes 11 de julio el proyecto de recuperación del radioteatro como forma de promocionar a los autores de las islas denominado Material acústico antiaislante, en el marco de los III Encuentros de la Creación Contemporánea en Magalia, organizados por la Red de Teatros Alternativos, que reúnen en el castillo propiedad del INAEM ubicado en Las Navas del Marqués (Ávila) a programadores, productores, distribuidores y artistas de 11 comunidades autónomas españolas.

Tras la presentación del proyecto y del libro que reúne las piezas de diez minutos escritas por 22 autores de Baleares originalmente en catalán, editadas con traducciones al castellano e inglés, ha tenido lugar la lectura de uno de esos textos, Control de pasaportes, de Marta Barceló, al que pusieron voz los actores Joan Manel Vadell y Laia Oliveras, de Baleares, acompañados de la bilbaína Matxalen de Pedro y el coruñés Iván Marcos. Al coloquio posterior se unió Vicent Ferrer, de Formentera, quien ideó este proyecto hace unos años.

Material acústico antiaislante, según Josep R. Cerdá, es la primera acción de apoyo a la autoría que realiza el Gobierno balear para promocionar a los escritores baleares en el exterior, “porque todas las ayudas habían estado enfocadas hasta ahora hacia las compañías y las productoras”. Según indicó, el proyecto ha sido efectivo a pesar de haber contado con muy poco presupuesto. Las obras se están emitiendo los sábados por la mañana en la emisora pública del Consell de Mallorca Onda Mallorca dentro de un magacine cultural. “Además, se pueden descargar de la página web de la emisora y escuchar en cualquier momento”, apuntó.

Cerdá indicó que este “catálogo de autores, no una antología, porque es un proyecto vivo”, según explicó, se formó contactando con todas las personas que escriben teatro en las islas. Se les pidió una pieza inédita de 10 minutos pensada para la radio. “El libro da imagen fiel de la escritura teatral en las islas; no son las obras representativas de cada autor, pero sí da una idea de su estilo. Las hay más convencionales y más experimentales y están piezas escritas por el veterano Alexandre Ballester hasta un joven de 20 años premiado recientemente en un concurso regional.

Marta Barceló apuntó que escribió el radiodrama sin haber realizado ningún curso previo sobre esta técnica, pero con la intuición de que los personajes se deben describir por lo que dicen o por lo que dicen que hacen, por lo que no tienen mucho sentido las habituales acotaciones en el teatro concebido originalmente para ser representado. “También me propuse unos diálogos televisivos, es decir, más dinámicos, a base de frases cortas y con efectos sorprendentes y sorpresas en la conversación”, explicó. Control de pasaportes narra la llegada de un matrimonio balear a Costa Rica para pasar las vacaciones. Pronto se descubren las desavenencias en la pareja, en las que interviene otro pasajero y el personal del puesto aduanero.

Josep R.Cerdá, que se definió como un “autor en excedencia” tras ser nombrado director de Artes Escénicas del Gobierno de Baleares, considera que el radioteatro parece “la prehistoria” pero sin embargo puede ser muy moderno y, de hecho, “el sonido como material escénico es un recurso muy atractivo, el micrófono en el escenario es un recurso icónico muy repetido y la producción es sencillísima comparada con la puesta en escena. En una obra de diez minutos el autor puede colocar cuarenta ubicaciones temporales”, añadió. Ferrer coincidió con él en su pronóstico de que este “teatro para ciegos” puede volver a conocer un auge.

Los Encuentros en Magalia son una muestra de teatro y danza alternativa a la que se ofrece en verano en España porque no programa obras cerradas sino procesos creativos. La organización selecciona a 42 creadores, entre autores, intérpretes y directores, que no se conocían ni habían trabajado antes juntos, y los concentra en un castillo para que, en diez días, monten doce propuestas de teatro, danza y performance. El proyecto está patrocinado por el Instituto Nacional de las Artes Escénicas y de la Música (INAEM) del Ministerio de Cultura del Gobierno de España y nueve comunidades autónomas, entre ellas el Gobierno de Baleares.

Las dos salas alternativas de las islas Baleares, Teatre del Mar y Teatre Sans, propusieron a dos actores: Joan Manel Vadell (Palma de Mallorca, 1972) y Laia Oliveras (Manresa, 1977). Las salas valencianas también propusieron a Carol Linuesa (Palma de Mallorca, 1974), actriz que trabaja en esa comunidad.

Horarios definitivos de las representaciones de los III Encuentros en Magalia el viernes 11 y el sábado 12 de julio


(Un momento de la representación el miércoles por la noche de Ventana a Manhattan, realizada en tres ventanas del palacio castillo de Magalia).

HORARIOS DEFINITIVOS.
VIERNES 11 julio


A las 12 horas, y con el título de Material acústico antiaislante, se expondrá el proyecto de teatro sonoro presentado por Illes Balears, que presenta Pep Cerdà, delegado de Artes Escénicas de la Consejería de educación y Cultura del Gobierno de las Islas Baleares. En ese marco, se hará una lectura dramatizada de un texto escrito específicamente como radioteatro, Control de pasaportes, de Marta Barceló (Baleares), que interpretarán Laia Oliveras (Baleares), Joan Manel Vadell (Baleares), Matxalen de Pedro (Euskadi) e Iván Marcos (Galicia).

A las 19 horas, se exhibe, en formato de lectura dramatizada, la obra de teatro Fuso negro, de Eva Hibernia (Cataluña), con dirección de Fernando Soto (Madrid), interpretada por José Chaves (Andalucía), Maribel Chica (Andalucía), Celso Giménez (Madrid) y Carmen Marín (Aragón).

A las 22.30 horas se exhibirá en el Centro Cultural de Caja de Ávila otra propuesta no textual, El tiempo de la sed, creación y dirección de María Burgos (Madrid) en la que intervienen Isaac Torres (Valencia), Cristina Núñez (Valencia), Izaskun Santamaría (Euskadi) y Élida Dorta (Canarias).

A las 24 horas se ha programado Hámster, de Santiago Cortegoso (Galicia), texto dirigido por Fernando Soto (Madrid) que ponen en escena Laia Oliveras (Baleares) y Juanjo Otero (Euskadi).

SÁBADO 12 julio.

Entre las 11 y las 20 horas tendrá lugar en el convento desacralizado de Santo Domingo y San Pablo la propuesta no textual Fedón, un estudio del paso del tiempo, creación y dirección de Jesús Barranco (Madrid) y Andrea Pacheco (Madrid-Chile), y en la que también participa Iván Marcos (Galicia).

A las 17 horas, se verá en el salón de actos del castillo Restos de miss series, creación y dirección de Bea Fernández (Castilla y León) en la que trabajan Jorge Lastra (Euskadi), Matxalen de Pedro (Euskadi) y Montse Penela (Madrid).

A las 19 horas, se ha programado en el claustro del castillo de Magalia Plastelina de Marta Buchaca (Cataluña), con dirección de Eva Hibernia (Cataluña), que será interpretada por José Chaves (Andalucía), Carmen Marín (Aragón), Carlos Pedrós (Canarias), José Dault (Aragón), Celso Giménez (Madrid), Carol Linuesa (Valencia) y Maribel Chica (Andalucía).

La última propuesta que se exhibe ante el público será, el sábado a las 22.30 horas, se pone en escena la lectura dramatizada de Todos los caminos, de Juan Pablo Heras (Madrid), dirigida por Carlos Álvarez-Ossorio (Galicia) e interpretada por José Dault (Aragón) y Carol Linuesa (Valencia). Se ha programado también en el convento desacralizado de Santo Domingo y San Pablo.

Eva Hibernia, autora y directora riojana en Magalia


La autora y directora teatral riojana Eva Hibernia es la única representante de La Rioja en los Encuentros de Creación Contemporánea en Magalia, el único festival de teatro y danza del verano español en el que no se programan obras terminadas, sino procesos creativos cuyo montaje final sólo se conocerá el día de la exhibición. Esta muestra, organizada por la Red de Teatros Alternativos, comenzó el 3 de julio con el encierro de 42 creadores e intérpretes españoles en el castillo ubicado en Las Navas del Marqués (Ávila) y ofrece al público desde el miércoles 9 al sábado 12 de julio doce propuestas de teatro, danza y performance cuyo resultado ahora mismo es una incógnita.

El INAEM y la Dirección General de Política e Industrias Culturales, ambos dependientes del Ministerio de Cultura del Gobierno de España y las comunidades autónomas de Cataluña, Castilla y León, Navarra, País Vasco, Andalucía, Aragón, Madrid, Canarias y Baleares patrocinan este evento, cuyo presupuesto total asciende a 155.000 euros.

La peculiar idiosincrasia de los Encuentros en Magalia los convierten en la auténtica “alternativa” a la rica oferta teatral cerrada que se exhibe en distintos festivales españoles durante el verano. La Red selecciona y reúne a 42 creadores, entre autores, intérpretes y directores, que no se conocían ni habían trabajado antes juntos. El reto es apasionante: tienen apenas siete días para ensayar 12 propuestas escénicas, que con su exhibición permitirán conocer el sobresaliente momento creativo que viven las nuevas tendencias y el teatro-danza no convencional en España.

Eva Hibernia (Logroño, 1973), autora y directora teatral y poeta, se introdujo en el teatro en grupos aficionados de su ciudad natal, estudió dramaturgia en la RESAD e interpretación en distintos talleres. En 1997 se marchó a vivir a Barcelona, donde ha desarrollado su carrera profesional. Fue accésit del premio Marqués de Bradomín en 1997 por El arponero herido por el tiempo; accésit del Premio SGAE de Teatro en 2005 por Fuso negro y ha estrenado en el Teatro Nacional de Cataluña (TNC) Una mujer en transparencia. Con el TNC y la Sala Ponent de Granollers va a dirigir su texto La América de Edward Hooper. También ha realizado una dramaturgia de El avaro, de Molière para una sugerente propuesta de títeres de la Compañía de Jordi Beltrán, donde todos los personajes son grifos y el agua es la que mueve las pasiones. Eva Hibernia tiene su propia compañía en Barcelona, Delirio, que trata de fusionar la poesía con otras artes, mezclando la palabra con el teatro, la música, la pintura y las performances. “Sacarla del soporte libro”, aclara.

En Magalia, Eva Hibernia está participando en una doble experiencia muy interesante: dirige Plastelina, de la catalana Marta Buchaca, un texto basado en un hecho real, el de los tres adolescentes que pegaron fuego y asesinaron a una mendiga en un cajero automático y de cómo ese suceso afecta a los chavales y, especialmente, a sus padres, y sobre la facilidad con que se emiten juicios sobre un hecho, especialmente la prensa. De hecho, el papel del periódico es el elemento escenográfico clave en el montaje. En paralelo, Eva ha sido seleccionada su obra Fuso Negro, que lo define así: “Casi un thriller, una investigación sobre un loco que se escapa del manicomio. Habla del amor y del trastorno, la locura que produce, de las barreras que te obliga a bajar y que te dejan indefenso”, declara. El título hace referencia a un personaje del ciclo gallego y de las Comedias bárbaras de Valle-Inclán. “Pero aquí es un personaje ausente, que no aparece nunca pero es el motor; en cierto sentido, encarna un símbolo”. En Magalia, deja hacer al director y a los actores y da su opinión. “Me preguntan mucho. Es muy enriquecedor para mí como escritora descubrir dónde encuentran los escollos para representar sus papeles”, apunta.

Eva Hibernia considera que los Encuentros de la creación contemporánea en Magalia son una experiencia “muy intensa”, hasta el punto de que le faltan “horas” para todo lo que quiere hacer en el encierro en el castillo propiedad del INAEM. “Además de que me remueve y me dan ganas de ponerme a escribir, estoy conociendo a creadores y compartiendo muchas experiencias que de otra forma sería imposible por lo cerrado y críptico que está todo el teatro, cómo la gente se saca las habichuelas en cada región de España y el grado de ilusión y cansancio que se va arrastrando”.

Romper las fronteras autonómicas

De las 12 propuestas escénicas que se exhiben en Las Navas del Marqués del 9 al 12 de julio, 5 se ofrecen en formato de lectura dramatizada y siete son propuestas escénicas que mixturan danza, teatro, coreografía, música y multimedia. Se exhibirán gratuitamente ante el público, pero también ante los programadores de las 32 salas alternativas españolas integradas en la Red y ante programadores, distribuidores directores de escena, productores privados, autores y críticos teatrales invitados, procedentes de toda España.

Los Encuentros de la Creación Contemporánea en Magalia tienen como uno de sus fines principales fomentar estrategias de colaboración entre creadores que ayuden a “romper” las barreras que impone la actual división autonómica. Además, tratan de encontrar productores para que estas propuestas, una vez terminadas de definir en los meses posteriores a los Encuentros, puedan ser distribuidas por todo el país. Cinco de las 28 propuestas estrenadas en Magalia en 2006 y 2007 se exhibieron con posterioridad en distintos teatros españoles, una cifra alta para la “peculiar” fórmula de la Red, porque se ensayan propuestas con intérpretes (no con compañías) de distintas regiones que no se conocían antes de encontrarse en el castillo abulense.

En total, Magalia ha seleccionado 12 de las 77 propuestas que respondieron a la convocatoria abierta de 2008. Cinco son teatro de texto y serán dirigidas por 3 directores (dos de ellos se encargarán de la puesta en escena de dos obras diferentes). Siete de las propuestas no textuales están firmadas por 9 creadores (dos de ellas son creación de dos artistas) y a estos nueve autores-intérpretes se unirán 26 actores, bailarines y performances, hasta un total de 42 personas distintas trabajando juntas en el “encierro” de Magalia.

En formato de lectura dramatizada, se ensayarán y exhibirán Plastelina, de Marta Buchaca (Cataluña), XXXV premio de teatro Ciudad de Alcoy; Todos los caminos, de Juan Pablo Heras (Madrid), premio Valle-Inclán de la Universidad Complutense; Hamster, de Santiago Cortegoso (Galicia); Fuso Negro, de Eva Hibernia (Cataluña), accésit del Premio de Teatro SGAE 2005; y Ventana a Manhattan, de Carles Mallol (Cataluña), finalista del V Premio Bartrina.

El madrileño Fernando Soto dirigirá Fuso Negro y Hámster; el gallego Carlos Álvarez-Ossorio pondrá en escena Ventana a Manhattan y Todos los caminos; y la catalana Eva Hibernia dirigirá Plastelina y no su propio texto, Fuso Negro, en este marco de colaboración, contraste y reflexión que propone Magalia.

Las propuestas escénicas mixtas seleccionadas para su exhibición las dirigirán sus propios creadores. Son Restos de miss series, de Bea Fernández (Castilla y León), una reflexión sobre el intérprete como catalizador del pensamiento ajeno; Fedón, un estudio del paso del tiempo, de Jesús Barranco y Andrea Pacheco (Madrid), que indaga en el deterioro físico del ser humano; Contra.natura, de Álex Serrano (Cataluña), proyecto ganador del 8º Premio de Proyectos de Artes Escénicas de Lleida que aborda la transformación en paisaje de la naturaleza que rodea al ser humano; El tiempo de la sed, de María Burgos (Madrid), investigación sobre el cuerpo como instrumento de guerra; El lamento de Donkarlos, versión libre a partir del Don Carlos de Schiller y de la ópera de Verdi, de José Manuel Mora y Javier Bastias (Madrid); Fuera–dentro–fuera, de Sara Molina (Andalucía), una reflexión sobre el papel del espectador individual y su conversión en público colectivo; y Una palabra, de Paloma Díaz (Madrid), homenaje al poder de las palabras para hacer, agitar e inquietar.

Para dar forma a estas creaciones, las salas integradas en la Red de Teatros Alternativos han propuesto a 42 artistas, procedentes de 11 comunidades autónomas:
- De Cataluña, Eva Hibernia, Marta Buchaca, Carles Mallol, Alex Serrano y David Climent.
- Del País Vasco, Juanjo Otero, Izaskun Santamaría, Jorge Lastra y Matxalen de Pedro.
- De Andalucía, José Chaves, Maribel Chica, Sara Molina, María del Mar Fuentes, Juan Luis Matilla, Mónica Francés y Fidel Cabeza.
- De Castilla y León, Bea Fernández.
- De Navarra, Elisa Arteta.
- De Aragón, José Dault, Yvonne Medina y Carmen Marín.
- De Madrid, Celso Giménez, Fernando Soto, Juan Pablo Heras, María Burgos, José Manuel Mora, Javier Bastias, Paloma Díaz, Montse Penela, Jesús Barranco y Andrea Pacheco.
- De Baleares, Laia Oliveras y Joan Manel Vadell.
- De Galicia, Santiago Cortegoso, Carlos Álvarez-Ossorio, Arantza Villar e Iván Marcos.
- De Canarias, Carlos Pedrós y Élida Dorta.
- De la Comunidad Valenciana, Carol Linuesa, Isaac Torres y Cristina Núñez.

Diálogos en Magalia

La Red de Teatros Alternativos promueve también en Magalia unas mesas redondas relacionadas con la creación actual. Este año se ofrecen tres.

El jueves 10 de julio, a las 12 horas, se ha programado el Proyecto Plataforma, iniciativa para la promoción y difusión de la creación escénica contemporánea no convencional española, que está promovido por los festivales de creación contemporánea más importantes del Estado español. Moderado por Isabel Blanco, programadora del FEST y directora de Endanza, participarán Jordi Fondevila, del Festival NEO de Barcelona, y Roberto Taboada (Festival ALT. de Vigo)

El viernes 11 de julio, a las 12 horas, y con el título de Material acústico antiaislante, se expondrá el proyecto de teatro sonoro presentado por Illes Balears, que presenta Pep Cerdà, delegado de Artes Escénicas de la Consejería de educación y Cultura del Gobierno de las Islas Baleares. En ese marco, se hará una lectura dramatizada de un texto escrito específicamente como radioteatro, Control de pasaportes, de Marta Barceló (Baleares), que interpretarán Laia Oliveras (Baleares), Joan Manel Vadell (Baleares), Matxalen de Pedro (Euskadi) e Iván Marcos (Galicia).

Además, tendrá lugar la Asamblea de la Red de Teatros Alternativos, en la que se debatirán proyectos y retos de futuro.

Las Navas del Marqués, capital del teatro alternativo español

• Desde hace tres años y durante diez días de julio, la localidad abulense de Las Navas del Marqués se convierte en la capital española del teatro alternativo. Es un enclave situado a 80 kilómetros de Madrid capital y 4.200 habitantes que multiplica su población en verano hasta alcanzar los 25.000 habitantes y nutre con gran cantidad de espectadores a los espectáculos programados durante los Encuentros en Magalia.

• La Red de Teatros Alternativos seleccionó este año 12 propuestas para su puesta en escena y exhibición en los Encuentros en Magalia de las 77 que recibió de 98 creadores de 11 países diferentes. De las procedentes de España, 18 venían de Madrid, 11 de Euskadi, 10 de Cataluña, 7 de la Comunidad Valenciana y 5 de Andalucía; seguidas de 3 de Aragón y Galicia, 2 de Castilla y León, Castilla-La Mancha, La Rioja y Navarra y 1 de Extremadura, Asturias, Baleares, Canarias, Murcia y Ceuta. 18 artistas extranjeros afincados en España también presentaron sus propuestas: 6 argentinos, 4 chilenos y el resto de Alemania, Bélgica, Italia, Colombia, Austria, Gran Bretaña, Australia y Brasil.

• La Red de Teatros Alternativos organiza otras actividades a lo largo del año como el Circuito de la Red de Teatros Alternativos, la Muestra de Danza y Teatro Contemporáneos (que este año tendrá lugar en Palma de Mallorca en otoño) y la participación en encuentros e intercambios de carácter nacional e internacional.

• La Red obtuvo en 2006 el Premio Max de la Crítica por su apuesta decidida por la nueva autoría, que promueve con iniciativas como los Encuentros de la Creación Contemporánea en Magalia.

• La Red de Teatros Alternativos agrupa a 32 espacios escénicos de gestión privada:
- 10 salas de Madrid: Triángulo, El canto de la cabra, Gurdulú, DT Espacio escénico, Teatro Lagrada, La nave de Cambaleo, Teatro Pradillo, Sala Cuarta Pared, Sala El montacargas y Sala Tarambana.
- 7 de Cataluña: Brossa Espai Escènic, La Planeta, Muntaner, Teatre de Ponent, Teatre Tantarantana, Versus Teatre y Teatre de L’Aurora.
- 4 de Andalucía. Sala Cero, Andanza, La imperdible y La Fundición.
- 2 de Galicia: Sala Nasa y Teatro Ensalle.
- 2 de la Comunidad Valenciana: Teatro de los Manantiales y Carme Teatre.
- 2 de Baleares: Teatre del Mar y Teatre Sans.
- 2 de Aragón: Teatro Arbolé y Teatro de la Estación.
- País Vasco: Sala La fundición.
- Navarra: ENT.
- Canarias: Teatro Victoria.

Cataluña es la comunidad autónoma que más respalda los Encuentros en Magalia y aporta 6 creadores


Cataluña y otras ocho comunidades autónomas y el INAEM del Ministerio de Cultura se han unido por tercer año consecutivo para patrocinar el único festival de verano español en el que no se programan obras terminadas, sino procesos creativos cuyo resultado final sólo se conocerá el día de la exhibición, y que organiza la Red de Teatros Alternativos. Son los Encuentros de Creación Contemporánea en Magalia, una experiencia que se repite por tercer año consecutivo en el Castillo de Magalia, en Las Navas del Marqués (Avila), entre el jueves 3 y el sábado 12 de julio.

En esta edición, son seis los creadores que han propuesto las 7 salas alternativas de la comunidad autónoma: los autores Eva Hibernia, Marta Buchaca y Carles Mallol, el performer Alex Serrano, la coreógrafa Bea Fernández y el actor David Climent.

La peculiar idiosincrasia de los Encuentros en Magalia lo convierten en la auténtica “alternativa” a la rica oferta teatral cerrada que se exhibe en distintos festivales españoles durante el verano. La Red selecciona y reúne a 42 creadores, entre autores, intérpretes y directores, que no se conocían ni habían trabajado antes juntos. El reto es apasionante: tienen apenas siete días para ensayar 12 propuestas escénicas, que con su exhibición permitirán conocer el sobresaliente momento creativo que viven las nuevas tendencias y el teatro-danza no convencional en España.

Alex Serrano (Barcelona, 1974) es un performer que vendió su agencia de publicidad hace 3 años para dedicarse a la creación teatral. Estudió diseño industrial, comunicación audiovisual y un master en comunicación interactiva y esos conocimientos los vuelca en sus espectaculares propuestas, como la que presenta en los Encuentros en Magalia: Contra.natura. “Nace de la reflexión sobre una actitud, el empecinamiento por dejar herencia, constancia de las cosas, cuando el tiempo es una goma de borrar que acabará con todo. Sólo quedan un 2% de las momias egipcias, yo desapareceré y también Las meninas”, señala. Así que escogió una piscina cubierta en ruinas en Las Navas del Marqués para ensayar su propuesta, porque el propio escenario ayuda a contextualizar mi mensaje. “Hay una primera parte, una instalación audiovisual para un ámbito museístico denominada Contra.natura: Artefacto, que se estrenó el 2 de junio en el festival Panorama de Olot. La segunda parte, que se exhibe en Magalia, es una versión de 30 minutos de la propuesta que se estrenará el 27 de noviembre en Lérida, titulada Contra.natura: Propuesta escénica, que he coescrito con Pau Palacios”.

El performer catalán tiene una agrupación (no le gusta llamar compañía) muy conocida, El señor Serrano, con la que ha estrenado Run (Correr), en 2004, y la trilogía Autopsia, compuesta por Autopsia, Mil tristes tigres y Europa (2005-2007). Llegó al teatro ya adulto. “Me enamoré al instante, y eso que soy el peor actor de Europa. Y me di cuenta de que hay una sobreexplotación brutal de los proyectores sin demasiados porqués, que crean atmósferas pero no dramaturgias ni contenidos. Yo busco una dramaturgia visual compaginada con imagen digital proyectada, que interactúa en tiempo real. Por ejemplo, me grabo bailando, trato esa imagen por ordenador, la multiplico y la proyecto en retardo, con efectos de onda; creo clones que actúan conmigo en tiempo real”, explica. “Magalia es un excelente banco de pruebas con todos los gastos pagados y tres comidas diarias, algo que no tengo ni en mi casa”, dice.

David Climent (Villarreal, 1977) estudió en el Aula de Teatro de la Universidad de Castellón y allí conoció a Pablo Molinero, con quien formó en Barcelona el mediático grupo Los corderos, que alcanzó notoriedad mediática en su primer montaje, con un elevado componente de agresividad: Crónica de José Agarrotado (menudo hijo de puta), a los que han seguido el monólogo El hombre visible y Tocamos a dos balas por cabeza. “Para nosotros, lo que hacemos es teatro, aunque nos programen en festivales de danza. Siempre hay texto, movimiento, música del ruidista Pablo Rega, algo de performance”, explica. “En cualquier caso, lo que nos define es el interés por la ficción y la convención teatral, huimos de lo naturalista y realista”, asegura.

Climent trabaja en la perfomance de Alex Serrano Contra.natura, “un trabajo muy alejado de lo que hacemos habitualmente, porque nosotros no solemos integrar al público en nuestros montajes; él nos pide más de nosotros mismos y menos que seamos un personaje. Yo no suelo hacer eso porque yo como persona no intereso en absoluto, pero formar parte del mundo de un creador siempre es fascinante”, indica. Lo que más le gusta de Magalia es poder ver procesos, “porque como espectador sólo recibes el resultado y muchas veces no sabes por qué se hacen las cosas de una manera y te quedas con las ganas de averiguarlo”. En su opinión, la propuesta de la Red de Teatros Alternativos es un magnífico escenario “para probar, perdernos, discutir y lo mejor, encontrarte con alguien de otro punto de España al que no conocías y con el que conectas”, dice.

“El cuerpo del bailarín es un archivo vivo del trabajo del creador”

Bea Fernández (Ponferrada, 1968) considera los Encuentros en Magalia, una “cita a ciegas” que supone un auténtico “reto”, pues debe dar vida su proyecto Restos de miss series, con intérpretes que conoció al llegar. “Eso es bastante estimulante, y peligroso, por supuesto, pero veo que todos tienen detrás un amplio bagaje y son profesionales con trayectoria y cosas que contar”, indica. Fernández dejó su Ponferrada natal a los 18 años para estudiar danza y coreografía en el Institut del Teatre de Barcelona y pronto comenzó a bailar en uno de los grupos míticos catalanes de la década de 1980, Danat Danza, que codirigían el leonés Alfonso Ordóñez y Sabine Darendorf, con cuyo montaje Bajo cantos rodados hay una salamandra, propuesta contemporánea inspirada en las danzas tradicionales de los Ancares y la Maragatería leoneses, recorrieron todo el mundo. “Estuvimos en Australia, Nueva York y es la única compañía española que ha bailado en el Tèatre de la Ville de París, la catedral de la danza que dirige Gerard Violet”, recuerda con orgullo Bea Fernández.

La bailarina leonesa bailó posteriormente en Nueva York, en Madrid con Olga Mesa y de nuevo en Cataluña con Margarita Guergué y después con Carmelo Salazar. “He tenido suerte porque siempre he escogido yo a las personas con las que quería trabajar; yo he ido a buscar a los directores”, subraya. Desde el 2000 está integrada en el colectivo barcelonés Las Santas, tres intérpretes que crearon esta plataforma que les permite “estar en constante creación pero no como compañía, sino en un formato más flexible para establecer colaboraciones; lo mismo hago un monólogo que nos juntamos dos de nosotras o creamos algo con más gente”, explica. Este equipo creativo abrió en una antigua fábrica textil del barrio del Raval La Poderosa, Espacio para la danza y sus contaminantes, que ofrece clases de técnica, improvisación y laboratorio y programa trabajos en proceso y prácticas “express” de creación escénica. “Hasta ahora había creado coreografías para mí y ésta es la primera vez que voy a trabajar con tres bailarines”, indica. Su propuesta parte de una pregunta: “¿Quiénes somos los intérpretes?, creo que somos trozos de cuerpo y de pensamientos de otros, porque hemos encarnado ideas de un creador”, confiesa. En su opinión, en la actualidad hay una gran preocupación por la memoria, tanto la histórica como la visual. “Hoy se graba todo, hay una necesidad de registrar todo, y pienso que el cuerpo del bailarín es un archivo vivo del trabajo del creador”, recalca. Como todas las propuestas de Magalia, en la suya también se desconoce el resultado. “He traído vídeo y quiero entrevistar a los artistas aquí alojados y quizá surja una instalación”, apunta.

Eva Hibernia (Logroño, 1973), autora y directora teatral y poeta, estudió dramaturgia en la RESAD e interpretación en distintos talleres. En 1997 se marchó a vivir a Barcelona, donde ha desarrollado su carrera profesional. Fue accésit del premio Marqués de Bradomín en 1997 por El arponero herido por el tiempo; accésit del Premio SGAE de Teatro en 2005 por Fuso negro y ha estrenado en el Teatro Nacional de Cataluña (TNC) Una mujer en transparencia. Con el TNC y la Sala Ponent de Granollers va a dirigir su texto La América de Edward Hooper. También ha realizado una dramaturgia de El avaro, de Molière para una sugerente propuesta de títeres de la Compañía de Jordi Beltrán, donde todos los personajes son grifos y el agua es la que mueve las pasiones. Eva Hibernia tiene su propia compañía en Barcelona, Delirio, que trata de fusionar la poesía con otras artes, mezclando la palabra con el teatro, la música, la pintura y las performances. “Sacarla del soporte libro”, aclara.

En Magalia, Eva Hibernia está participando en una doble experiencia muy interesante: dirige Plastelina, de la catalana Marta Buchaca, un texto basado en un hecho real, el de los tres adolescentes que pegaron fuego y asesinaron a una mendiga en un cajero automático y de cómo ese suceso afecta a los chavales y, especialmente, a sus padres, y sobre la facilidad con que se emiten juicios sobre un hecho, especialmente la prensa. De hecho, el papel del periódico es el elemento escenográfico clave en el montaje. En paralelo, Eva ha sido seleccionada su obra Fuso Negro, que lo define así: “Casi un thriller, una investigación sobre un loco que se escapa del manicomio. Habla del amor y del trastorno, la locura que produce, de las barreras que te obliga a bajar y que te dejan indefenso”, declara. El título hace referencia a un personaje del ciclo gallego y de las Comedias bárbaras de Valle-Inclán. “Pero aquí es un personaje ausente, que no aparece nunca pero es el motor; en cierto sentido, encarna un símbolo”. En Magalia, deja hacer al director y a los actores y da su opinión. “Me preguntan mucho. Es muy enriquecedor para mí como escritora descubrir dónde encuentran los escollos para representar sus papeles”, apunta.

Eva Hibernia considera que los Encuentros de la creación contemporánea en Magalia son una experiencia “muy intensa”, hasta el punto de que le faltan “horas” para todo lo que quiere hacer en el encierro en el castillo propiedad del INAEM. “Además de que me remueve y me dan ganas de ponerme a escribir, estoy conociendo a creadores y compartiendo muchas experiencias que de otra forma sería imposible por lo cerrado y críptico que está todo el teatro, cómo la gente se saca las habichuelas en cada región de España y el grado de ilusión y cansancio que se va arrastrando”, concluye.

Isaac Torres, único murciano en los Encuentros en Magalia


El actor yeclano Isaac Tores es el único representante de Murcia en los Encuentros de Creación Contemporánea en Magalia, el único festival de teatro y danza del verano español en el que no se programan obras terminadas, sino procesos creativos cuyo montaje final sólo se conocerá el día de la exhibición. Esta muestra, organizada por la Red de Teatros Alternativos, comenzó el 3 de julio con el encierro de 42 creadores e intérpretes españoles en el castillo ubicado en Las Navas del Marqués (Ávila) y ofrecerá al público del miércoles 9 al sábado 12 de julio doce propuestas de teatro, danza y performance cuyo resultado ahora mismo es una incógnita.

El INAEM y la Dirección General de Política e Industrias Culturales, ambos dependientes del Ministerio de Cultura del Gobierno de España y las comunidades autónomas de Cataluña, Castilla y León, Navarra, País Vasco, Andalucía, Aragón, Madrid, Canarias y Baleares patrocinan este evento, cuyo presupuesto total asciende a 155.000 euros.

La peculiar idiosincrasia de los Encuentros en Magalia lo convierten en la auténtica “alternativa” a la rica oferta teatral cerrada que se exhibe en distintos festivales españoles durante el verano. La Red selecciona y reúne a 42 creadores, entre autores, intérpretes y directores, que no se conocían ni habían trabajado antes juntos. El reto es apasionante: tienen apenas siete días para ensayar 12 propuestas escénicas, que con su exhibición permitirán conocer el sobresaliente momento creativo que viven las nuevas tendencias y el teatro-danza no convencional en España.

Isaac Torres (Yecla, Murcia, 1983) dejó su ciudad natal a los 18 años para estudiar arte dramático en Valencia, pero sólo duró un año. En Alicante estudió Educación Física y formó Silencio Teatro, grupo con el que estrenó In_fausto: relato de una familia feliz, e Hilos, escrita por él. Con el grupo Locos por el teatro, “una ONG en la que la mitad de los intérpretes tenían una enfermedad mental y la otra mitad también, pero no estábamos diagnosticados”, señala con sorna, estrenó Locura compartida y Cargados de tiempo. Y con Fanfarlo, el espectáculo Vértigo de teatro de calle. Regresó a Valencia tres años después y trabajó en teatro clásico para Arden Producciones, Teatres de la Generalitat y Teatro de los Manantiales, sala alternativa que le ha propuesto como intérprete para Magalia. Con ellos ha participado en Ciudadano Sade y pronto estrenará Ground Zero, ambas de Chimo Flores.

En Murcia ha trabajado con Juan Antonio Saorín y ha participado en montajes de la compañía Les bufons, “cuyos componentes son al 50% de Murcia y de Elche”, explica.

En el castillo de Las Navas del Marqués trabaja en la propuesta de la madrileña María Burgos El tiempo de la sed junto a tres bailarinas. Una obra que habla de la violencia en África, las matanzas de Ruanda y Sierra Leona y los niños soldados. “Es un teatro muy corporal, casi danza contemporánea; el proceso está siendo maravilloso porque ella tiene ideas bastante claras pero no cerradas y nos hemos entendido desde el principio. Nos proponía un tema: la muerte, la guerra, África y similares y nosotros se lo exponíamos a nivel corporal”, relata. “Además, me interesa todo tipo de teatro, el gesto y lo físico pero también el texto, porque la fuerza de la palabra es espeluznante”, recalca. Isaac Torres considera los Encuentros en Magalia una iniciativa “muy arriesgada y potente. No lo conocía pero una vez dentro es tan espectacular que hasta me resultaba raro que pudiera existir algo tan positivo.”

Carol Linuesa, Cristina Núñez, Isaac Pérez, David Climent y Celso Jiménez, cinco valencianos en Magalia


Carol Linuesa, Cristina Núñez, Isaac Pérez, David Climent y Celso Jiménez son los cuatro actores valencianos que participan este año en los Encuentros de Creación Contemporánea en Magalia, el único festival de teatro y danza del verano español en el que no se programan obras terminadas, sino procesos creativos cuyo montaje final sólo se conocerá el día de la exhibición. Esta muestra, organizada por la Red de Teatros Alternativos, comenzó el 3 de julio con el encierro de 42 creadores e intérpretes españoles en el castillo ubicado en Las Navas del Marqués (Ávila) y ofrecerá al público del miércoles 9 al sábado 12 de julio doce propuestas de teatro, danza y performance cuyo resultado ahora mismo es una incógnita.

El INAEM y la Dirección General de Política e Industrias Culturales, ambos dependientes del Ministerio de Cultura del Gobierno de España y las comunidades autónomas de Cataluña, Castilla y León, Navarra, País Vasco, Andalucía, Aragón, Madrid, Canarias y Baleares patrocinan este evento, cuyo presupuesto total asciende a 155.000 euros.

La peculiar idiosincrasia de los Encuentros en Magalia los convierten en la auténtica “alternativa” a la rica oferta teatral cerrada que se exhibe en distintos festivales españoles durante el verano. La Red selecciona y reúne a 42 creadores, entre autores, intérpretes y directores, que no se conocían ni habían trabajado antes juntos. El reto es apasionante: tienen apenas siete días para ensayar 12 propuestas escénicas, que con su exhibición permitirán conocer el sobresaliente momento creativo que viven las nuevas tendencias y el teatro-danza no convencional en España.

Celso Giménez (Valencia, 1983) estudió interpretación durante tres años en la Escuela Off, con Rafa Cruz, de la Fundación Shakespeare, en Valencia y posteriormente se especializó en Dramaturgia en la RESAD de Madrid. En la capital de España forma el grupo La Tristura y estrena La velocidad del padre, la velocidad de la madre y, más recientemente, Años 90. Nacimos para ser estrellas, dos espectáculos de teatro de texto escritos por Pablo Fidalgo y él, estrenados en El Canto de la Cabra. Se vieron en Valencia en el Teatro de los Manantiales y El corral de la Olivera.

En Las Navas del Marqués interviene en dos lecturas dramatizadas, Plastelina, de Marta Buchaca, que aborda la violencia gratuita de aquellos jóvenes que quemaron a una mendiga en un cajero automático, y Fuso Negro, de Eva Hibernia. “En la primera interpreto a uno de los adolescentes asesinos y en la segunda hago un pequeño papel pero seré una especie de maestro de ceremonias, leyendo las acotaciones”, explica. La primera obra se hará en el claustro del castillo, mientras que la segunda se hará en la biblioteca, “un sitio sin luz natural que tiene una atmósfera especial”, indica. Lo mejor de la experiencia magaliana es que no hay un teatro propiamente dicho, “pero estamos construyendo muchos en los espacios que nos ofrece el castillo”, dice. Celso Giménez quiere orientar su trabajo en la escritura teatral y no a la interpretación. “Me interesa hacer teatro y dominar el mayor número posible de disciplinas, de ahí que me venga muy bien haber actuado para conocer la cadencia de un texto, su ritmo, poesía, la verbalidad de las palabras”, apunta.

David Climent (Villarreal, 1977) estudió en el Aula de Teatro de la Universidad de Castellón y allí conoció a Pablo Molinero, con quien formó en Barcelona el mediático grupo Los corderos, que alcanzó notoriedad mediática en su primer montaje, con un elevado componente de agresividad: Crónica de José Agarrotado (menudo hijo de puta), a los que han seguido el monólogo El hombre visible y Tocamos a dos balas por cabeza. “Para nosotros, lo que hacemos es teatro, aunque nos programen en festivales de danza. Siempre hay texto, movimiento, música del ruidista Pablo Rega, algo de performance”, explica. “En cualquier caso, lo que nos define es el interés por la ficción y la convención teatral, huimos de lo naturalista y realista”, asegura.

Climent trabaja en la perfomance de Alex Serrano Contra.natura, “un trabajo muy alejado de lo que hacemos habitualmente, porque nosotros no solemos integrar al público en nuestros montajes; él nos pide más de nosotros mismos y menos que seamos un personaje. Yo no suelo hacer eso porque yo como persona no intereso en absoluto, pero formar parte del mundo de un creador siempre es fascinante”, indica. Lo que más le gusta de Magalia es poder ver procesos, “porque como espectador sólo recibes el resultado y muchas veces no sabes por qué se hacen las cosas de una manera y te quedas con las ganas de averiguarlo”. En su opinión, la propuesta de la Red de Teatros Alternativos es un magnífico escenario “para probar, perdernos, discutir y lo mejor, encontrarte con alguien de otro punto de España al que no conocías y con el que conectas”, dice.

Isaac Torres (Yecla, Murcia, 1983) dejó su ciudad natal a los 18 años para estudiar arte dramático en Valencia, pero sólo duró un año. En Alicante estudió Educación Física y formó Silencio Teatro, grupo con el que estrenó In_fausto: relato de una familia feliz, e Hilos, escrita por él. Con el grupo Locos por el teatro, “una ONG en la que la mitad de los intérpretes tenían una enfermedad mental y la otra mitad también, pero no estábamos diagnosticados”, señala con sorna, estrenó Locura compartida y Cargados de tiempo. Y con Fanfarlo, el espectáculo Vértigo de teatro de calle. Regresó a Valencia tres años después y trabajó en teatro clásico para Arden Producciones, Teatres de la Generalitat y Teatro de los Manantiales, sala alternativa que le ha propuesto como intérprete para Magalia. Con ellos ha participado en Ciudadano Sade y pronto estrenará Ground Zero, ambas de Chimo Flores.

En el castillo de Las Navas del Marqués trabaja en la propuesta de la madrileña María Burgos El tiempo de la sed junto a tres bailarinas. Una obra que habla de la violencia en África, las matanzas de Ruanda y Sierra Leona y los niños soldados. “Es un teatro muy corporal, casi danza contemporánea; el proceso está siendo maravilloso porque ella tiene ideas bastante claras pero no cerradas y nos hemos entendido desde el principio. Nos proponía un tema: la muerte, la guerra, África y similares y nosotros se lo exponíamos a nivel corporal”, relata. “Además, me interesa todo tipo de teatro, el gesto y lo físico pero también el texto, porque la fuerza de la palabra es espeluznante”, recalca. Isaac Torres considera los Encuentros en Magalia una iniciativa “muy arriesgada y potente. No lo conocía pero una vez dentro es tan espectacular que hasta me resultaba raro que pudiera existir algo tan positivo.”

Cristina Núñez (Valdepeñas, 1981) vive desde niña en Valencia capital. Allí estudió teatro textual en la ESAD pero enseguida reorientó su mirada hacia “lo corporal, lo físico, el movimiento”, así que estudió danza clásica y contemporánea en distintos cursos, que luego amplió en Barcelona, Londres y Oporto. Con una compañera creó su primera compañía, La Imposible, y sus primeras coreografías, Una entrevista con mucho cuento y Nuestros deseos. En el escenario del Teatro de los Manantiales ha trabajado en Especulaciones, Makbet y Ciudadano Sade y en sus instalaciones ha impartido talleres. “Sentía la necesidad de un cambio y desde enero estoy en Barcelona, porque quiero estudiar dramaturgia. Siempre he tenido la necesidad de investigar y construir y necesito herramientas”, señala.

Coincidió con Isaac Torres en Valencia en Ciudadano Sade y ahora en el encierro abulense en El tiempo de la sed. “La propuesta es una vorágine salpicada de información: el punto de partida te lleva la batalla a escena y transformar los conflictos en lenguaje del cuerpo”. Según indica, está muy implicada. “Me interesa muchísimo el discurso que propone María Burgos y la manera de abordar el trabajo, por la mezcla de lenguajes y porque me parece bonito hablar del dolor”, dice Cristina Núñez, quien disfruta en Magalia con la idea de “intercambio, el trabajo express y la burbuja de piedra” que le rodea para crear.

Carol Linuesa (Palma de Mallorca, 1974), que ha desarrollado la mayor parte de su carrera profesional en Valencia, se confiesa “encantada” de participar en un proyecto “en el que puedes conocer gente no sólo a nivel personal sino trabajando, porque compruebas maneras muy diferentes de ver y entender las cosas, de interpretar y dirigir y todos los intercambios en arte son buenos”. Linuesa trabajó en Espai Obert de Palma de Mallorca a los 18 años y tres años después se trasladó a la ESAD de Valencia para estudiar arte dramático, en la modalidad de textual. Allí no ha parado de trabajar: lo ha hecho con Carme Teatre, con Bramant Teatre (en la espléndida Construyendo a Verónica dirigida por Jerónimo Cornuelles y ahora en Reencuentros), con Arden (en R-III, sobre el Ricardo III de Shakespeare, y en Contratemps) y con el grupo de Castellón Veu adiós (en Convocatoria de casting). “En alguna ocasión también he subido a los escenarios de Baleares, con el grupo L’Ombra del cranc (La sombra del cangrejo) en Desde l’obscur, con Pere Fullana, un trabajo de investigación sobre cómo meter miedo al público”, explica.

En Magalia, Linuesa está en el elenco de tres lecturas dramatizadas, “y en lo que caiga, porque me encanta la facilidad con la que se puede participar en otros proyectos aquí encerrados en el castillo”. En su caso, sí tenía experiencia de trabajar a presión, con pocos días para montar una obra. “Con el Teatre del mar de Palma y Tornaveu de Valencia he participado en una coproducción que adapta Tirant lo blanc para estudiantes de secundaria, dirigida por Txell Roda, que ha girado por las islas este curso. Por eso no me daba mucho miedo venir”, declara.

Carlos Álvarez-Ossorio, Iván Marcos y Arantza Villar, tres artistas gallegos en los Encuentros en Magalia


El director Carlos Álvarez-Ossorio y los actores Iván Marcos y Arantza Villar son la triple representación gallega en los III Encuentros de Creación Contemporánea en Magalia, el único festival de teatro y danza que se programa en verano en España que no ofrece obras terminadas, sino procesos creativos cuyo montaje final sólo se conocerá el día de la exhibición. Esta muestra, que se celebra por tercer año consecutivo organizada por la Red de Teatros Alternativos, comenzó el 3 de julio con el encierro de 42 creadores e intérpretes españoles en el castillo ubicado en Las Navas del Marqués (Ávila) y ofrecerá al público del miércoles 9 al sábado 12 de julio doce propuestas de teatro, danza y performance cuyo resultado ahora mismo es una incógnita.

El INAEM y la Dirección General de Política e Industrias Culturales, ambos dependientes del Ministerio de Cultura del Gobierno de España y las comunidades autónomas de Cataluña, Castilla y León, Navarra, País Vasco, Andalucía, Aragón, Madrid, Canarias y Baleares patrocinan este evento, cuyo presupuesto total asciende a 155.000 euros.

La peculiar idiosincrasia de los Encuentros en Magalia lo convierten en la auténtica “alternativa” a la rica oferta teatral cerrada que se exhibe en distintos festivales españoles durante el verano. La Red selecciona y reúne a 42 artistas, entre autores, intérpretes y directores, que no se conocían ni habían trabajado antes juntos. El reto es apasionante: tienen apenas siete días para ensayar 12 propuestas escénicas, cuya exhibición permitirá conocer el sobresaliente momento creativo que viven las nuevas tendencias y el teatro-danza no convencional en España.

Carlos Álvarez-Ossorio (Sevilla, 1973), residente en Santiago de Compostela desde hace cuatro años, adonde llegó acompañando a su pareja, tiene el encargo de poner en escena dos lecturas dramatizadas con “muchas virtudes y algunos defectos que hay que resolver escénicamente”: Ventana a Manhattan, del catalán Carles Mallol, y Todos los caminos, del madrileño Juan Pablo Heras, con dos grupos de “grandes” actores y problemas de tiempo. “Alguno de los intérpretes está ensayando a la vez tres trabajos y no hay posibilidades de profundizar más en el texto, porque hay un compromiso de exhibirlo con unos resultados más o menos estéticos”, declara. Sólo eligió una de las piezas, Todos los caminos, “que tiene mucho que ver conmigo”.

Álvarez-Ossorio, licenciado en Comunicación Audiovisual, estudió dirección escénica en el Instituto del Teatro de Sevilla y en Territorio Nuevos Tiempos (TNT), laboratorio de la compañía Atalaya que dirige Ricardo Iniesta. Al acabar, formó su propia compañía, Cámara negra, con quien representó en la ciudad hispalense La gaviota, Otelo, Apuntes para un Hamlet, Hamlet Machine y La soledad de los campos de algodón, “siempre dramaturgias propias muy radicales para pocos actores”, aclara. También dirigió a grupos alternativos y en el Centro Andaluz de Teatro (Cuaderno de bitácora, de Damaris Matos, y Y Julieta, del griego Akis Dimos). Hace cuatro años se trasladó a Santiago de Compostela y Cámara negra ha representado en gallego Brand, un Ibsen nunca antes interpretado en España. En su periplo norteño ganó en 2007 un premio Max al mejor autor en ese idioma, por A casa do pai (La casa del padre).

En su opinión, Magalia es el lugar adecuado para reciclarse. “Especialmente los que tenemos compañía propia, lo que te lleva a una vorágine endogámica y donde los problemas de producción y distribución te acaban afectando. Aquí te centras en el proceso puramente artístico, lo que se convierte en un pequeño oasis dentro de los problemas del sector”. Según recalcó, “la propuesta de la Red de Teatros Alternativos es genial como laboratorio, pero tiene el peligro de ser un espejismo: me encanta trabajar en espacios no teatrales pero a la hora de la realidad es muy complicado y se convierten en obras difíciles de vender”, concluye.

Iván Marcos (A Coruña, 1980) se formó en teatro en su ciudad natal con el prestigioso creador Manuel Lourenzo, “una de las personas que más ha hecho por el teatro en Galicia”, subraya, en su escuela privada, Casa Hamlet, y luego se marchó becado a Londres. “Trabajé con Philippe Gaulier, coetáneo de Lecqoc y el teatro de la complicidad, y después seguí estudiando en el Circo Media de Bristol, una escuela de movimiento y circo contemporáneo”, recuerda. Allí montó la compañía Hoax Producciones. “Hoax significa aquello que parece milagroso pero en el fondo es un truco”, aclara. Creó espectáculos con su socio, el escocés Al Seed, y trabajó por toda Europa durante cinco años con distintos espectáculos. “Aquella compañía fue creciendo con gente de todo el mundo y luego cada uno siguió profundizando en sus propios territorios. Yo comencé a estudiar coreografía y arte digital en el Dantington Collage de Devon, mientras trabajaba para otras compañías. También creé y estrené el espectáculo sobre la identidad Desires, danza, teatro y multimedia antes de regresar a Galicia”, indica.

Nada más regresar a Galicia asistió como espectador a una obra del grupo santiagués Matarile Teatro. “Fui a hablar con Ana Vallés y Baltasar Patiño, nos entendimos y nos gustamos y con gran generosidad me abrieron la puerta para el espectáculo que ahora mismo tienen en cartel, Animales artificiales, con el que acabo de actuar en la Feria de Artes Escénicas de Portugal en Faro, desde donde vine a Ávila para participar en los Encuentros de Creación Contemporánea de Magalia”, explica Iván Marcos.

“Me encanta la convocatoria de la Red de Teatros Alternativos, un espacio para perderse de forma creativa sin la presión del productor y del beneficio económico. Eso permite tomar riesgos y experimentar. Esas oportunidades no las tienes ahí fuera. En teatro tienes que trabajar con certezas y no con hipótesis y el método de prueba y error, que aquí sí es posible”, señala el actor coruñés. “Tengo la impresión de que en este país se han hecho muchos esfuerzos públicos y se han dado ayudas a la formación y a la producción y me parece que no hay demasiados espacios donde mostrar las creaciones. No sirve de nada nuestro trabajo si no se puede ver y esa preocupación la estoy compartiendo con las personas que estamos aquí encerradas en el castillo”, concluye.

Arantza Villar (Santiago, 1976) se formó en la escuela Espacio Aberto, de Santiago, con Carlos Neira, y nada más concluir sus estudios hizo una sustitución en Misiles melódicos, de José Sanchis Sinisterra, coproducción de los centros dramáticos aragonés y gallego. También actuó en la carpa itinerante A cultura circula del grupo Chévere, con el que sigue trabajando y está girando con el espectáculo de teatro familiar sobre nanotecnología Alá no fondo hai sitio abondo (Hay mucho sitio al fondo, en castellano). Arantza Villar forma parte de Nut Teatro, de Santiago de Compostela, con el que ha actuado en Corpos disidentes y A mirada de Pier. “Es un trabajo preformativo, utilizamos vídeo y mezclamos muchas disciplinas”, explica. Ahora hemos traducido al gallego la última obra de la autora “maldita” británica Sarah Kane, 4:48 Psicose, que pronto se verá en los escenarios gallegos.

En Magalia, Villar actúa en la performance Fuera-dentro-fuera de la granadina Sara Molina. “Una propuesta muy interesante y complicada, porque es hablar de la mirada del espectador desde tres perspectivas diferentes. En este tríptico, hay una pieza de teatro de texto y dos más basadas en las acciones y la imagen. Yo he hecho teatro de los dos tipos y estoy cómoda en ambos”, recalca. Magalia supone, en su opinión, “un sitio de encuentro fantástico, a nivel profesional y humano, porque estamos conociendo de primera mano cómo está la realidad del teatro en el país y nunca tienes una oportunidad así”. Según explica, Galicia vive un buen momento creativo. “Hay trabajo, aunque con dificultades de distribución, especialmente para los lenguajes más contemporáneos, por eso son tan importantes las salas alternativas, que potencian, programan y ceden sus espacios para que podamos trabajar, concluye.

Nueve artistas andaluces se reencuentran en Magalia


Nueve artistas andaluces han sido seleccionados para los III Encuentros de Creación Contemporánea en Magalia, el único festival de teatro y danza que se programa en verano en España que no ofrece obras terminadas, sino procesos creativos cuyo montaje final sólo se conocerá el día de la exhibición. Son José Chaves, Maribel Chica, Sara Molina, María del Mar Fuentes, Juan Luis Matilla, Mónica Francés, Carlos Álvarez-Ossorio, Paloma Díaz y Fidel Cabeza.

Esta muestra, que se celebra por tercer año consecutivo organizada por la Red de Teatros Alternativos, comenzó el 3 de julio con el encierro de 42 creadores e intérpretes españoles en el castillo ubicado en Las Navas del Marqués (Ávila) y ofrecerá al público del 9 al 12 de julio doce propuestas de teatro, danza y performance cuyo resultado ahora mismo es una incógnita.

La Junta de Andalucía es uno de los patrocinadores de este evento, cuyo presupuesto total de 155.000 euros costean el INAEM y la Dirección General de Política e Industrias Culturales, ambos dependientes del Ministerio de Cultura del Gobierno de España, y las comunidades autónomas de Cataluña, Castilla y León, Navarra, Aragón, País Vasco, Madrid, Canarias y Baleares.

La peculiar idiosincrasia de los Encuentros en Magalia lo convierten en la auténtica “alternativa” a la rica oferta teatral cerrada que se exhibe en distintos festivales españoles durante el verano. La Red selecciona y reúne a 42 artistas, entre autores, intérpretes y directores, que no se conocían ni habían trabajado antes juntos. El reto es apasionante: tienen apenas siete días para ensayar 12 propuestas escénicas, cuya exhibición permitirá conocer el sobresaliente momento creativo que viven las nuevas tendencias y el teatro-danza no convencional en España.

José Chaves (Córdoba, 1959) es un actor formado en el Centro Andaluz de Teatro (CAT) muy conocido por su participación en programas de Canal Sur de televisión y por sus incursiones en el cine (en Solas, de Benito Zambrano; Siete vírgenes, de Alberto Rodríguez, Once días contigo, de Chus Ponce y, especialmente, en Yo soy la Juani, de Bigas Luna). En la actualidad, trabaja con Digo Digo Teatro, compañía sevillana especializada en comedia para adultos de creación propia que ha dado éxitos como Vampiros y que estrenará en breve 2060. El fin del mundo. Está en Magalia a propuesta de la sevillana Sala Cero, con quien ha trabajado en Recalificados. “Está siendo un trabajo muy intenso por su carácter de laboratorio donde jugar, probar e investigar para ver qué sale antes que buscar un resultado final”, explica.

Chaves prepara dos lecturas dramatizadas: Fuso Negro, de Eva Hibernia, donde es dirigido por Fernando Soto, y Plastelina, de Marta Buchaca, con puesta en escena de Eva Hibernia. “Es curioso, la primera está mejor construida dramatúrgicamente pero la segunda tiene un tema más interesante porque está basada en un suceso real, habla de la violencia gratuita, de esos chavales que quemaron a una mendiga en un cajero automático”, señala el actor cordobés. “También es interesante trabajar con dos directores muy diferentes: Fernando hace que el actor proponga cosas mientras que Eva tiene todo más resuelto”, afirma. Lo que más le satisface de la cita abulense es el grado de colaboración entre los 42 artistas presentes.

Nueve intérpretes andaluces

Hay más actores andaluces seleccionados para los Encuentros de Creación Contemporánea, como Maribel Chica (Jaén, 1973), vecina de Sevilla desde hace 16 años. “Magalia es un subidón, muy inspirador, toda una puesta a punto para cualquier actor”, destaca. Chica participó en la edición de 2007 en una de las actividades paralelas, los Diálogos en Magalia. “Acompañamos tres alumnos a Antonio Onetti a un debate sobre escuelas españolas de dramaturgia y leímos en público dos textos, uno de ellos mío, Las dos Saras. Vi esto y flipé, porque me daba una envidia cochina el ambiente de los actores, tan concentrados y a tope en el castillo y pedí a las salas Cero y La Fundición que me propusieran”, dice.

Actriz formada en el CAT que tuvo su propia compañía, Decocoyhuevo, y rostro habitual de los culebrones de Canal Sur, está centrada ahora en la escritura teatral. En Magalia ensaya dos lecturas dramatizadas. “Lo mejor, y más raro, es tener en el castillo a la autora de Fuso Negro, Eva Hibernia, con la que puedo comentar cosas de mi personaje. Plastelina, una obra más convencional, está cobrando mucha vida con la puesta en escena”, indica. El “encierro” le está rejuveneciendo: “Interpreto a una chica de 16 años y a una veinteañera, así que encantada de quitarme años”, sonríe.

Jienense es también Sara Molina (Jaén, 1958) que ha desarrollado toda su carrera en Granada, además de dar clases de interpretación en la actualidad en la ESAEM de Málaga. Artista más veterana y con más recorrido entre los presentes en Magalia, no en vano ha dirigido 27 montajes con su compañía Q Teatro, una de las formaciones señeras en Andalucía en teatro contemporáneo, participó como directora en la edición de 2007 y ahora llega con una propuesta propia, el tríptico Fuera-dentro-fuera, inspirado en el castillo. “Magalia es un espacio físico pero también mental que favorece el encuentro, así que he preparado tres dispositivos escénicos, tres artilugios que construyes para reflexionar sobre el papel del público”, explica. En el primero, Fuera, quiere colocar al espectador en un lugar alejado de la acción, “al contrario de lo que sucede en la realidad, que todo se organiza para que el público lo vea nítidamente; quiero conseguir que surja el deseo de verlo más cerca”. En Dentro utiliza un texto suyo escrito para la radio, titulado RKO. “El teatro radiofónico es un dentrofuera curioso porque la intimidad del estudio se combina con la proyección a públicos lejanos”, añade. Finalmente, en la tercera parte, Fuera, homenajea al actor. “Tiene más conexión con el pasacalle, el circo y la improvisación y quiero que concluya conduciendo a los espectadores a una manifestación dadá y surrealista”, apunta.

Sara Molina es una directora exigente con discurso propio. “Trato de revitalizar el intelecto”, afirma, con propuestas espectaculares y ofreciendo “pensamiento denso, aunque el formato sea el cabaré”. El año pasado tuvo discusiones intensas con los autores de los textos que dirigió. “Fue muy interesante y me permitió revisar planteamientos, porque hay autores que tratan de escribir la representación y eso no es posible, porque la puesta en escena siempre es trasgresión. También me ayudó a enfocar más nítidamente mis puntos de vista, porque lo que de verdad me importa son los actores; de hecho, lo supedito todo a ellos”, recalca. Ha tenido suerte con los que le han correspondido las dos ediciones. “Hay que alabarlos, porque llegan sin conocerte y tienen que entender en muy poco tiempo tu planteamiento y lo que esperas de ellos; afortunadamente cuento con un grupo que muestra gran interés y muy buena disposición”, concluye.

Sara Molina es de las pocas directoras que se ha traído de la mano a Las Navas a una intérprete a la que conoce bien, Mónica Francés (Granada, 1971), integrante de su compañía Q Teatre desde 1995. “Con ella he desarrollado mi carrera como actriz y estoy con ella porque me identifico con su discurso”, señala. Licenciada en Hispánicas y crítica teatral del periódico Granada Hoy desde hace cuatro años, no ha pasado por escuelas de interpretación. “He aprendido en faena, con Sara, con Francisco Ortuño, ahora director del CAT, y con Juan Navarro, que ha trabajado con Rodrigo García y Roger Bernat”, añade.

El proceso creativo en Magalia es, en su opinión “un descubrimiento, un encuentro precioso, pues supone una auténtica vuelta de tuerca al trabajar en muy pocos días, además de lo hermoso que supone el encuentro con otros colegas de la profesión”, explica. Respecto a su trabajo en Fuera-dentro-fuera, destaca lo que supone de “cuestionamiento de la mirada del espectador y de la búsqueda del espectáculo como acontecimiento”. Le gusta que Sara Molina escriba sus obras a partir de los intérpretes con los que cuenta. “Tenía una idea base que no estaba cerrada y que la ha reescrito y sobrescrito para el espacio y con los instrumentos que tiene, que somos nosotros los actores. No me importa el resultado final, sólo espero pasármelo bien y no perder el ejercicio lúdico, el placer de interpretar y trabajar en equipo”, concluye.

María del Mar Fuentes (Almería, 1976) también forma parte del elenco que tiene que construir Fuera-dentro-fuera, de Sara Molina. Formada en los cursos que promovía la asociación AL-Teatro de su ciudad natal, hizo mucha animación, café-teatro y muchas obras de autores almerienses, “como el primer texto de Paco Becerra, último premio Calderón, cuando no era un escritor conocido”, recuerda. Tras estudiar Humanidades, se licenció en la ESAD de Sevilla y es máster en gestión cultural por la SGAE y la Universidad Complutense. En la actualidad, trabaja en la oficina de la Red de Teatros Alternativos en Madrid.

“Gracias a Magalia puedo volver al escenario con una directora que siempre he admirado y con la que hice un curso en Almería siendo estudiante”, indica. “Es como un regalo. He estado en la organización y sabía que era una oportunidad y ahora puedo vivirla, no tanto porque te vaya a salir una oferta para actuar sino por compartir y conocer cómo trabajan otros”, explica. “El teatro es un mundo difícil y aquí te regalan un tiempo, un espacio y una gente. Por eso Magalia es un sitio necesario que todavía está creciendo y necesita dar con la fórmula exacta, que todavía no ha encontrado, pero que hay que apoyar”, reivindica. Al haber trabajado en la oficina de coordinación, sabe de las dificultades de sacarlo adelante: “Es muy duro y tiene muchos riesgos, se vive con mucha incertidumbre debido a los problemas de financiación, con una gestión que tiene que ser muy rápida y en la que el error puede tener consecuencias, por lo que hay que trabajar al límite”, recuerda.

Carlos Álvarez-Ossorio (Sevilla, 1973) es con Sara Molina el otro director andaluz que acude a Magalia, con el encargo de poner en escena dos obras con “muchas virtudes y algunos defectos que hay que resolver escénicamente”: Ventana a Manhattan, del catalán Carles Mallol, y Todos los caminos, del madrileño Juan Pablo Heras, con dos grupos de grandes actores y problemas de tiempo. “Alguno de los intérpretes está ensayando a la vez tres trabajos y no hay posibilidades de profundizar más en el texto, porque hay un compromiso de exhibirlo con unos resultados más o menos estéticos”, declara. Sólo eligió una de las piezas, Todos los caminos, “que tiene mucho que ver conmigo”.

Álvarez-Ossorio, licenciado en Comunicación Audiovisual, estudió dirección escénica en el Instituto del Teatro de Sevilla y en Territorio Nuevos Tiempos (TNT), laboratorio de la compañía Atalaya que dirige Ricardo Iniesta. Al acabar, formó su propia compañía, Cámara negra, con quien representó en la ciudad hispalense La gaviota, Otelo, Apuntes para un Hamlet, Hamlet Machine y La soledad de los campos de algodón, “siempre dramaturgias propias muy radicales para pocos actores”, aclara. También dirigió a grupos alternativos y en el CAT (Cuaderno de bitácora, de Damaris Matos, y Y Julieta, del griego Akis Dimos). Hace cuatro años se trasladó a Santiago de Compostela y Cámara negra ha representado en gallego Brand, un Ibsen nunca antes interpretado en España. En su periplo gallego ganó en 2007 un premio Max al mejor autor en ese idioma, por A casa do pai (La casa del padre).

En su opinión, Magalia es el lugar adecuado para reciclarse. “Especialmente los que tenemos compañía propia, lo que te lleva a una vorágine endogámica y donde los problemas de producción y distribución te acaban afectando. Aquí te centras en el proceso puramente artístico, lo que se convierte en un pequeño oasis dentro de los problemas del sector”. En su opinión, la propuesta de la Red de Teatros Alternativos es “genial como laboratorio, pero tiene el peligro de ser un espejismo: me encanta trabajar en espacios no teatrales pero a la hora de la realidad es muy complicado y se convierten en obras difíciles de vender”, concluye.

Paloma Díaz (Madrid, 1969), residente en Sevilla desde los 12 años, es la impulsora de la compañía La Permanente, para la que ha firmado las coreografías Ha pasado un ángel y Sé o no sé. Antes se formó en el Instituto del Teatro de Sevilla y en la Folkwang de Essen (Alemania), con bailarines de Pina Bausch, y con Carmen Werner. A Magalia llega con un proyecto propio, Una palabra, para el que cuenta con el también sevillano Juan Luis Matilla. “Me interesa trabajar con la palabra como negación, porque lo que debe servir para comunicarnos se convierte en lo contrario. Analizo la mentira, lo que se deja de decir, lo que yo pienso que tu piensas que yo pienso, la verborrea con la que tenemos que convivir, las palabras que no se han dicho y que no sé qué pasa luego con ellas”, reflexiona. “Supongo que si necesito hacer una coreografía de eso es porque no tengo suficientes palabras para explicarlo, pero dicen que el 70% de la comunicación es gestualidad, comunicación no verbal, así que quiero bailar eso”, añade.

En su opinión, “Magalia son diez días para volar, porque lo interesante es el proceso. Aquí espero encontrar claves, tesoros para coger y partes para desechar. Siento la presión del resultado, que tengo que mostrar algo y quedar bien, pero sé que no es tiempo suficiente y que necesitaré más para que de esta idea salga un espectáculo”, añade. Cuenta con una beca de creación coreográfica de la Comunidad de Madrid y una subvención de la Junta de Andalucía. “Dedicarme a esto es una necesidad de expresión, quiero ser comprendida y necesito esa empatía. Me encantaría enganchar”, indica.

En su propuesta Una palabra participa Juan Luis Matilla (Salamanca, 1978), afincado desde niño en Sevilla, donde estudió danza y comenzó a bailar (Yo cocino y él friega los platos, con el Centro de Artes Escénicas; Tus hijos me están jodiendo la vida, con la compañía Mopa), antes de hacerlo también en Valencia (Ten tides, con Cel Ras) y Bruselas. “Magalia es maravilloso, especialmente para quienes hemos trabajado mucho en solitario. Cuando te juntas con la gente se multiplican las ideas, crece la experiencia y descubres que tus propuestas se vuelven más interesantes”, apunta.

En su opinión, lo importante de la experiencia de Magalia es el proceso. “Igual sale algo concreto o se queda aquí pero dentro de unos años te vuelves a encontrar con alguien que has conocido estos días y salta la chispa y nuevas colaboraciones”, indica. Además, está comprobando que los autores están abiertos a los intérpretes. “Es una constante ahora mismo: la danza actual no es tanto una propuesta cerrada sino una creación de un director a partir de lo que le proponen sus bailarines; se trabaja más con las personas”, concluye. Participa.

Fidel Cabeza (Algeciras, Cádiz, 1974) es pianista de clásico que desde hace 8 años se ha especializado en acompañamiento de danza clásica y española en las clases del Conservatorio de Sevilla, además de colaborar con los cursos que imparte la Compañía Andaluza de Danza. “Es una técnica mucho más sucia, porque tienes que estar improvisando para acompañar a lo que te está diciendo el bailarín; es un trabajo más peligroso, porque se hace sin partitura y sin saber mucho antes lo que vas a tocar. Ahora mismo ya no sé donde tengo el ojo y creo que mi mejor visión es la periférica”, señala. También ha colaborado con el coro de su ciudad natal, la Sociedad Algecireña de Fomento (SAF), donde cantó y con los que ha interpretado el Catuli Carmina para coro y cuatro pianos de Karl Off recientemente.

Cabeza está en Magalia para acompañar el proyecto de Javier Sánchez Bastias y José Manuel Mora El lamento de donkarlos, una versión libre a partir del Don Carlos de Schiller y de la ópera de Verdi cuyo contenido, a pesar de estar presente en todos los ensayos, todavía no conoce bien. “Toco la reducción de orquesta a piano y un tema de Domenico Modugno, pero hasta ahora en los ensayos se cambian continuamente las cosas y pocas dudas me han solucionado mis compañeros”, declara. Está en Magalia “porque me gusta decir a todo que sí y de todo se aprende y en el Conservatorio he hecho cosas relacionadas con el teatro”, indica. En su opinión, “Magalia es el sitio ideal para trabajar con cierta tranquilidad, meditar y pensar las cosas, aunque no lo elegiría por el frío que hace. Soy de los que están a gusto en Sevilla en agosto a 45 grados. Noto las manos bien cuando la gota de sudor me corre por la espalda al interpretar”, concluye.